Cuando tienes presencia en las redes sociales debes saber manejarlas para sacarles el máximo provecho. Cada una tiene orientaciones distintas y debes tenerlo claro al decidir tener un perfil en ellas. En Posicionamiento Web Cáceres queremos comentarte cuáles son los errores que se deben evitar en LinkedIn, bien seas que tratas de impulsar tu marca personal o una empresa, porque nos hemos dado cuenta de que muchos usuarios desaprovechan las ventajas que representa esta plataforma al darle un uso inadecuado.
Errores que se deben evitar en LinkedIn si eres una empresa
Siendo una red profesional, LinkedIn ofrece la posibilidad de crear perfiles para empresas siguiendo algunas reglas y ofrece grandes posibilidades para ampliar la red de contactos, contactar posibles empleados, compartir información y tratar con posibles clientes. Pero como sucede con cualquier plataforma, si no gestionas bien la cuenta caerás en algunos de las fallas comunes de las que te hablaremos a continuación.
No tener un objetivo claro
¿De qué te sirve tener una cuenta en LinkedIn -o en cualquier otra red social- si no tienes una estrategia definida, con objetivos claros sobre lo que quieres alcanzar? Sin esto será complicado que puedas optimizar tu perfil y saber qué información te interesa ofrecer.
Si no hay una estrategia lo más probable es que no tengas a alguien a cargo del social media; como consecuencia quizás crees una cuenta que terminará abandonada, sin ninguna actualización que a la larga solo dará una imagen ante quienes intenten contactarla por esta vía.
Información incompleta
Completar el perfil es una obligación tanto para empresas como individuos si quieren ofrecer una imagen profesional. Para las cuentas corporativas en LinkedIn se exige al menos el 50 % de los datos estén llenos, pero lo mejor es llegar al máximo. Además de dar una mejor visión ayuda en el posicionamiento.
Incluye palabras claves por las cuales te puedan ubicar otros usuarios. Dentro de la información que compartes tiene que estar la dirección web de la empresa, el blog corporativo y las formas de contacto como el correo electrónico.
No preparar a los empleados para usar LinkedIn
Vamos a plantear dos escenarios en este caso; el primero es aquellas empresas que no permiten el uso de las redes sociales a sus trabajadores, aún cuando estos las pueden utilizar en su favor. Plantear algunas normas de uso es mejor que cerrar el acceso por completo.
Del otro lado tenemos a quienes permiten su uso pero no los capacitan para que puedan aprovecharla. Si una empresa quiere ganar visibilidad a través de sus empleados debe asegurarse que estos sepan cómo aprovechar cada una de las funciones de la red social como tener perfiles optimizados, compartir contenido que represente a la empresa, interactuar con la página de la compañía y saber hablar en su nombre con posibles clientes, etc.
Desconocer el medio
LinkedIn ayuda a la empresa siempre que se le dé el uso correcto. Para ello hay que entender sus características y que, a diferencia de otras plataformas sociales, su objetivo principal es generar relaciones laborales. Por lo tanto, todo lo que se comparta a través de ella tiene que estar dirigido en esa vía. Piénsalo bien antes de sincronizarlo con otras redes, si no aporta nada a tu estrategia de marketing online, entonces es preferible no hacerlo.
Fallas comunes al impulsar la marca personal
Los usuarios individuales también cometen errores que afectan su imagen ante colegas y posibles empleadores, de manera que se convierten en un obstáculo para alcanzar los objetivos que se plantean al estar en esta red social. Tener un perfil optimizado, subir la imagen adecuada (profesional) son dos aspectos que se deben cuidar, pero hay que ir más allá. Veamos cuáles son esas prácticas que debemos dejar a un lado si queremos que la cuenta funcione.
No completar el sumario
Lo primero que buscará leer un usuario al visitar el perfil del otro es el sumario porque este resume las habilidades, fortalezas, formación y motivaciones. Si tu objetivo es buscar un empleo tienes que tenerlo. Como consejo, escríbelo tú mismo y en primera persona para que sea real, no pidas a alguien más que lo haga por ti.
Tener información inconsistente
Los datos presentes en el perfil profesional de LinkedIn y en el currículum deben coincidir. Así que debes cuidar de colocar información exacta de los lugares en los que has trabajado, las fechas y los cargos; de lo contrario confundirás a los posibles empleadores y perderás oportunidades por no ser consistente. Un consejo importante: a pesar de que la información debe ser la misma, tiene que estar adaptada para cada medio. En el caso del perfil digital debe incluir las palabras claves por las cuales te puedan encontrar en las búsquedas.
Desaprovechar las recomendaciones
Las recomendaciones son comentarios que tienen otras personas acerca de tu experiencia laboral y le indican a posibles empleadores si vale la pena contactarte y te da mayor credibilidad. Funcionan mejor las que vienen de tus superiores, antiguos empleadores y clientes. Puedes pedir a otros que hagan una recomendación sobre tu
trabajo y explica los motivos, a cambio ofrece hacer también una en su perfil.
Dedicarse solo a buscar trabajo
Sí, LinkedIn te ofrece la posibilidad de acceder a nuevas oportunidades laborales pero no pienses que solo por tener un perfil, las ofertas llegarán por sí solas. Para que eso suceda tienes que participar en grupos, generar relaciones, interactuar, compartir contenido de valor y que represente tus habilidades.
Contacta con las personas adecuadas, aquellas que aporten algo a tu meta personal, pertenezcan a tu sector y posibles empleadores para que así tu perfil sea consistente. La manera cómo usas LinkedIn determinará tu éxito en esta red social.
Toma nota de estos errores que se deben evitar en LinkedIn y sácale provecho a la plataforma. ¿Conoces algún otro? Compártelo con nosotros.
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